El bandido Zhang Mazi, junto a Tang, llega a la remota Ciudad Ganso haciéndose pasar por su nuevo gobernador. Pero frente a él se encuentra el mafioso local Huang, quien vive en la ciudadela fortificada que domina la ciudad. Aunque Tang es consciente de los anteriores acuerdos financieros de Huang con el ex-gobernador de la ciudad, Zhang no está interesado en compartir su riqueza con un ladrón al que encuentra tan indigno como a sí mismo.